Claves del Olympique de Lyon - Real Madrid

El Real Madrid salió dormidísimo en la primera mitad del encuentro, mientras que el Olympique de Lyon, por su parte, salió muy enchufado, tanto que no paró de generar peligro en todas sus acometidas. Fue en la segunda parte cuando el Madrid dejó sus miedos a un lado y se dedicó a jugar al fútbol. Fue entonces cuando Cristiano Ronaldo y Sergio Ramos metieron dos palos casi seguidos.

Los galos ejercían una buena presión y paraban el juego de los blancos a base de golpes sin llegar a la violencia. ¿Qué esperar de un partido de Champions?

Cristiano rebentó el palo izquierdo de Lloris

El resultado es positivo, pero la manera de jugar de nuestro equipo no lo es. Despistes tontos como el de la defensa madrileña en un partido de la Champions de semejantes alturas puede valernos la eliminación. 

Los errores del Madrid se relacionan a los que ha tenido habitualmente esta temporada, como por ejemplo no mantener la calma con la pelota en los pies, la relajación  o no sentenciar el partido... Algo que nos cuesta bastante en estos últimos partidos (¿Será por el cansancio?)

Muy poco hizo el Lyon para empatar. Más que casta, sería más correcto decir suerte. Un tanto que desmoraliza a cualquiera, pero si nos lo paramos a pensar es el mejor resultado de un equipo español en la Champions (El Barça perdió, el sevilla está eliminado y el Valencia empató en casa). Pero todo y así, no nos podemos dormir.

Respecto a los mejores del partido fueron Di María y Benzemá. El argentino es un rayo, está arriba atacando y cuando menos te lo esperas está ejerciendo de central, algo increíble... y Karim 42 segundos después de salir al campo marcó, con un poco de suerte, la verdad.

Mención a parte es el caso de Adebayor que no vio el cuero en todo el partido. Sergio Ramos fue uno de los peores del encuentro según muchos, pero sinceramente a mi me gustó como jugó; Tampoco hace falta dramatizar tanto su actuación...

Vamos a ver si Europa sigue siendo aquel territorio prohibido para los blancos, que presentan una leve mejoría al equipo de Pellegrini pero que los fantasmas del pasado no les dejan dormir.